El verano esta llegando y con eso las altas temperaturas y los días tomando el sol. Yo soy extremadamente blanca de piel y necesito una protección real. La piel tiene memoria y necesitamos protegerla pero para eso tenemos que usar siempre protección solar.
JĀSÖN nació en California en 1959, fabrica cosméticos naturales que son seguros para toda la familia. Su código de honor parte de seleccionar los ingredientes, formular para garantizar eficacia y seguridad, no testar en animales y aplicar su política medioambiental, en la que tratan de hacer un uso racional de los recursos y minimizar y gestionar los residuos además de emplear material reciclado en los envases.
Hoy os voy a hablar del protector mineral SPF 30 para pieles sensibles como la mía. No tiene filtros químicos y tampoco tiene perfume. No penséis que no nos va a proteger pero tenemos que saber que sus filtros son biológicos para una mejor protección y esta enriquecido con extractos de caléndula y camomila que es conocida por sus efectos calmantes. Se puede utilizar el protector solar de JĀSÖN en bebes a partir de 6 meses.
Hay que añadir que este protector solar y todos los cosméticos de la marca JĀSÖN no contienen: parabenos, SLS,vaselinas, colorantes artificiales, ni ftalatos. . Es hipoalergénico.
El protector solar de JĀSÖN es resistente al agua y se tiene que renovar cada 80 minutos porque es el tiempo que es resistente al agua. Normalmente, cada dos horas son bañarme ya suelo renovar la protección y si me baño al salir del agua me vuelvo a proteger la piel. Antes de salir de casa, suelo echar el protector media hora antes de la exposición. No tomo el sol en las horas centrales del día porque tengo la piel sensible y además muy blanca.
El protector solar viene en un formato de tubo en el que al apretar sale producto y mucho más cómodo porque a través de el se puede ver la cantidad que hay dentro. La boquilla es bastante grande aunque el producto al ser espeso regula bastante la cantidad que sale.
Como dije antes tiene una textura densa pero no grasa que se extiende con facilidad. Se absorbe rápido y se puede utilizar tanto en cuerpo como en rostro.
Yo suelo utilizarlo todos los días en la cara, brazos y escote porque es lo que está a contacto con el sol. He cogido color pero no me he quemado ninguno de los días y eso que he estado expuesta al sol. Me ha gustado que no tiene olor, no mancha la ropa y además no me engrasa la piel cuando la utilizo la cara. No me han salido imperfecciones y me siento protegida. No deja un aspecto muy blanquecino. Es una crema que me ha sorprendido por todo lo que es contado y porque me ha ido bien al contacto con mi piel reactiva. Esta recomendada para pieles sensibles y es verdad. Necesitas poca cantidad para todo el cuerpo.
La cantidad, viene en gramos, es de 113gramos y tiene un precio de 13-15 euros.
¿Qué os ha parecido este protector solar de JĀSÖN?
